OpenAI anunció la incorporación de un nuevo “modo de estudio” en ChatGPT, una función diseñada para apoyar a los estudiantes a “resolver problemas escolares paso a paso en lugar de simplemente obtener la respuesta”, según explicó la compañía.
La empresa detalla que, al activar esta modalidad, los usuarios acceden a un conjunto de preguntas orientativas cuyas respuestas se ajustan a sus objetivos y nivel de habilidad, con el propósito de profundizar en sus conocimientos. La intención es que el chatbot se emplee “no solo para completar tareas, sino para aprender de manera significativa”.
En un panorama educativo transformado por la IA, Turnitin lanza Turnitin Clarity y la nueva generación de Turnitin Feedback Studio, herramientas que buscan no solo abordar la integridad académica, sino también guiar a estudiantes y educadores hacia un uso responsable de la IA. En entrevista exclusiva con WIRED, Chris Caren, CEO de Turnitin, profundiza en la visión de la compañía y los desafíos de integrar la IA en el aula. 
El funcionamiento de esta herramienta se basa en instrucciones personalizadas, desarrolladas en colaboración con educadores, pedagogos y científicos. Estas indicaciones fomentan la participación activa, regulan la carga cognitiva, impulsan la metacognición y la autorreflexión, estimulan la curiosidad y ofrecen retroalimentación práctica y constructiva. OpenAI señala que estas directrices están fundamentadas en investigaciones de largo plazo sobre procesos de aprendizaje.
Robbie Torney, director senior de Programas de IA en Common Sense Media, sostiene que este enfoque “es una contribución positiva para lograr un uso eficaz de la inteligencia artificial en la educación. Incluso en la era digital, el aprendizaje más efectivo ocurre cuando los estudiantes se entusiasman y participan activamente en el contenido”.
Características del modo de aprendizaje de ChatGPT
El equipo responsable destaca que el modo de estudio de ChatGPT se distingue por cuatro características esenciales:
- Mensajes interactivos: combina preguntas socráticas, pistas y cuestionamientos para la autorreflexión, orientados a guiar la comprensión y promover el aprendizaje activo, en lugar de entregar respuestas directas.
- Respuestas escalonadas: la información se presenta en secciones claras y organizadas, resaltando las conexiones clave entre temas, lo que mantiene el interés y evita la sobrecarga en temas complejos al ofrecer el contexto justo.
- Soporte personalizado: las lecciones se adaptan al nivel del usuario, tras un cuestionario inicial que evalúa su conocimiento previo y considerando el historial de conversaciones anteriores.
- Verificación de conocimientos: cuestionarios y preguntas abiertas, acompañados de comentarios personalizados para monitorear el progreso, facilitan la retención y aplicación de lo aprendido en distintos contextos.
¿Cómo activar la nueva función?
Para acceder al modo de estudio, los interesados deben ingresar a la sección “Herramientas”, ubicada en la parte inferior de la barra de búsqueda de ChatGPT, y seleccionar “Aprende y estudia”. El sistema ofrece tres opciones sugeridas: “Ayúdame con la tarea”, “Explícame un tema” y “Crea un examen de práctica”.
Al elegir alguna, se presentan preguntas como: ¿Qué nivel o grado estás cursando? ¿De qué materia es la tarea y qué tipo de ejercicio necesitas resolver? ¿Sobre qué tema requieres más información? ¿Prefieres preguntas tipo test, abiertas o una combinación? Tras responder, el usuario recibe respuestas que invitan a formular nuevos cuestionamientos o solicitar mayor información para resolver dudas o profundizar en el contenido.
Esta función ya está disponible para usuarios gratuitos y suscriptores de los planes Plus, Pro y Team. Se espera que próximamente también se incorpore a la membresía Edu. OpenAI tiene previsto añadir en el futuro visualizaciones más claras, establecimiento de objetivos en las conversaciones y mayor personalización.
Dudas sobre la IA en la educación
El lanzamiento se da en un contexto en el que diversas investigaciones han cuestionado el uso de la inteligencia artificial en la educación, señalando posibles impactos negativos en ciertas funciones cognitivas y en el desarrollo del pensamiento crítico.
Un experimento reciente del MIT Media Lab reveló que el uso frecuente y exclusivo de chatbots para redactar textos académicos produce un efecto cognitivo adverso: disminuye la actividad cerebral y limita las capacidades de aprendizaje.
