Y esto no se limita a la imagen. La IA también optimiza el audio, permitiendo que el sonido se adapte dinámicamente a cada tipo de escena o contenido. Si además se complementa con una barra de sonido Samsung, entra en juego Q-Symphony, que sincroniza ambos sistemas para generar un sonido envolvente más rico, más profundo y con mayor realismo.
Pantalla anti-reflejos y sin distracciones
Colores intensos, negros más profundos, brillo sorprendente.Cortesía Samsung
Uno de los grandes desafíos para cualquier televisor premium es su desempeño en diferentes condiciones de iluminación. Samsung resuelve este punto con su tecnología OLED Glare Free, una pantalla anti-reflejos optimizada para conservar el contraste infinito característico del OLED, sin importar si entra luz natural o artificial.
La capa de revestimiento especial reduce los reflejos sin sacrificar brillo ni fidelidad de color. Esto no solo mejora la experiencia de ver contenido durante el día, sino que mantiene la integridad visual del contenido, como fue concebido por su creador. Esta característica ha sido certificada por Pantone por su precisión de color, sumando otro punto a favor del consumidor más exigente.
HDR10+: más allá del contraste
Vive el gaming como nunca antes.Cortesía Samsung
El soporte para HDR10+, estándar desarrollado por Samsung, garantiza que cada escena se reproduzca con el brillo y contraste adecuados. Esta tecnología analiza y ajusta dinámicamente cada fotograma, asegurando que el contenido mantenga su intención artística, sin importar la fuente. Ya no se trata solo de ver con detalle, sino de sentir cada escena con una nueva profundidad emocional.
Los gamers también tienen motivos para integrar a su radar Samsung OLED. Gracias a su bajo tiempo de respuesta, colores nítidos, alto contraste y capacidades de IA, el OLED se convierte en el Gaming TV definitivo. Y con pantalla anti-reflejos, ni siquiera la luz del sol o una lámpara mal ubicada arruinarán una partida.
Samsung no solo está vendiendo televisores, está rediseñando la manera en que interactuamos con ellos. Con Vision AI, la pantalla deja de ser un display y se convierte en un ente inteligente, capaz de adaptarse al usuario, optimizar cada experiencia y conectarse con todo un ecosistema de dispositivos.
En un mundo donde cada detalle importa, Samsung OLED no es solo un televisor, es la evolución del entretenimiento en casa. Y esa evolución, ya comenzó.