Calificación WIRED: 8/10
Durante décadas, Sennheiser ha sido sinónimo de excelencia acústica, aunque reservada para quienes podían invertir en equipos de gama alta. Con sus nuevos audífonos, los Accentum Open, la firma alemana quiere romper esa barrera para ofrecer una experiencia sonora cuidada, accesible y pensada para el día a día. ¿Puede un par de audífonos económicos conservar el ADN sonoro de la marca? En WIRED en Español los pusimos a prueba.
Los Accentum Open llegan en el formato bien conocido de los true wireless, con un estuche pequeño y dos audífonos de ajuste open-ear, con sensores e imanes, bajo un diseño sobrio y funcional. No buscan llamar la atención, sino concentrarse en la experiencia sonora desde el primer uso. 
Llevan el apellido “Open” porque no buscan aislar al usuario del exterior. El cuerpo del auricular cubre el oído y se ajusta bien, pero no ejerce un bloqueo físico importante para el sonido de fuera ni lo aminora con sofisticado software. La marca ha diseñado el equipo para que permita a los usuarios estar al tanto de lo que pasa a su alrededor, en caso de que suene una alarma, toquen una puerta o se aproxime un vehículo. Esta tendencia en el mercado de los audífonos paulatinamente cobra fuerza y es popular en corredores, ciclistas y personas que trabajan desde sus hogares.
Estos Accentum Open se escuchan sorprendentemente claros. Puedes distinguir los instrumentos que conforman una canción reproducida desde una app de streaming convencional e identificar detalles sutiles que con otros audífonos del mismo precio no aparecen. Los bajos tienen potencia, un detalle llamativo considerando la naturaleza del auricular. También se escuchan bastante alto, aunque si viajas en transporte público, el volumen no bastará para ocultar el ruido exterior.
Se cargan mediante conexión USB Tipo-C y ofrecen hasta 28 horas de reproducción sumando la carga del estuche, mientras que cada audífono alcanza hasta seis horas de autonomía. Su desempeño energético es notable: los utilicé durante una jornada laboral completa para escuchar música y la batería se mantuvo estable, sin interrupciones ni momentos críticos por falta de carga. Además, con solo una hora de carga recuperan su capacidad máxima.
Cabe destacar que los audífonos más baratos de Sennheiser son intencionalmente minimalistas. No es necesario conectarlos a la app intermedia de la marca y tampoco es posible modificar el perfil de sonido. Así como salen de caja, se conectan al teléfono sin más pasos. Sennheiser invita a los usuarios a confiar en el perfil sonoro que pulió equilibrado para los géneros más populares. Tras las semanas de prueba, el sonido me ha convencido.
A considerar: el emparejamiento
La conectividad puede mejorar. Esa sencillez que prometen los audífonos se difumina cuando llega el momento de emparejar los auriculares. El proceso es poco intuitivo. No cuentan con un botón físico que lo inicie o signos visuales que orienten. En su lugar, es necesario que ambos auriculares estén sobre los oídos y que el usuario toque por más de dos segundos el área de los comandos. Entonces escuchará un sonido característico del emparejamiento.
Aunque el proceso inicial de emparejamiento puede resultar confuso, una vez dominado, los Accentum Open revelan una de sus mejores virtudes: la conectividad multipunto. Si el usuario ya vinculó sus audífonos a la computadora y al teléfono, puede perfectamente escuchar el audio de ambas fuentes sin necesitar de movimientos complejos. Reproduces el video en el explorador o en la app y los auriculares sabrán cambiar la fuente. Este es un detalle bastante valorado, sobre todo por aquellos usuarios acostumbrados al ecosistema de Apple.
El micrófono no está a la altura
Los Accentum Open son una gran opción para escuchar música, pero tropiezan cuando se trata comunicación. El micrófono incluido es, en el mejor de los casos, funcional. Si bien tiene filtro de ruido que inhibe, por ejemplo, el paso de un auto o conversaciones cercanas, la mayor parte del tiempo la voz presenta variaciones de volumen y se escucha enlatada o robotizada. Este hecho es uno de los principales retos que enfrentan los true wireless de gama de entrada. Claramente el micrófono ayudará en una llamada espontánea o para mandar un audio de WhatsApp, pero limitado cuando se trata de una junta o una exposición. Tómalo en cuenta.
Nuestro veredicto
Los nuevos audífonos de Sennheiser entran fácilmente en esa categoría que tanto gusta de “buenos, bonitos y baratos”. La calidad de audio de la firma alemana es innegable y la apuesta por la sencillez de uso me parece acertada. Por supuesto, tienen algunos puntos a mejorar propios de la gama a la que pertenecen, pero las ventajas de transporte, autonomía e interconexión los eclipsan por completo. En definitiva son una buena opción para aquellas personas interesadas en acercarse al mundo increíblemente complejo que es la audiofilia.
Por su características, recomendaría los Accentum Open para deportistas y personas que se muevan por una ciudad caótica que buscan buen sonido pero todavía no quieren adentrarse demasiado en configuraciones complicadas.
Están disponibles por 2,199 pesos en la tienda oficial de Sennheiser.
