El gobierno de México anunció una inversión de 163,540 millones de pesos para modernizar y ampliar la Red Nacional de Transmisión, con el propósito de beneficiar a más de 50 millones de usuarios. La iniciativa, coordinada por la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y la Secretaría de Energía (Sener), contempla la incorporación de tecnologías de última generación para garantizar un suministro confiable de electricidad, interconectar regiones con alto potencial de energías renovables, descongestionar puntos críticos y fortalecer los mecanismos de respuesta ante fenómenos naturales.
Claudia Sheinbaum, presidenta de México, afirmó que “es una inversión muy importante que permitirá interconectar a toda la República Mexicana. Estamos fortaleciendo la soberanía energética y poniendo al interés público y a las personas en el centro de nuestras acciones”.
El plan prevé la construcción de 275 nuevas líneas de transmisión estratégicas y 524 subestaciones eléctricas, enfocadas en cubrir necesidades específicas en tres zonas del país:
- Zona Norte: con 69 proyectos que incluyen 137 líneas y 247 subestaciones; el objetivo es atender polos industriales y corredores de desarrollo.
- Zona Centro: con 49 proyectos, 90 líneas y 181 subestaciones; se busca mejorar la distribución eléctrica, priorizando las áreas industriales.
- Zona Sur: con 30 proyectos, que abarcan 48 líneas y 96 subestaciones; se pretende llevar electricidad a más de un millón de hogares sin acceso al servicio, además de resolver problemas de saturación en estados como Veracruz, Oaxaca y Chiapas.
Luz Elena González Escobar, titular de la Sener, explicó que las redes de transmisión funcionan como “autopistas por las que viaja la electricidad a lo largo y ancho del país”, y son esenciales para llevar la energía desde las centrales generadoras hasta hogares, empresas y comunidades rurales.
“Modernizar esta infraestructura no es tarea sencilla ni puede dejarse en manos privadas, porque está en juego la confiabilidad del sistema eléctrico, además de ser un asunto de seguridad y justicia social”, subrayó González Escobar.
En la actualidad, la red nacional de transmisión está conformada por alrededor de 111,000 kilómetros de líneas y 2,300 subestaciones eléctricas. Según datos oficiales, esta infraestructura representa una cobertura equivalente a recorrer nueve veces la distancia entre México y China.
México apuesta por nuevas tecnologías para optimizar su red eléctrica
Por su parte, Emilia Calleja Alor, directora general de la CFE, informó que más de 5,000 técnicos especializados trabajan en el mantenimiento y modernización de los equipos. “Estamos sustituyendo transformadores, bancos de baterías y sistemas de control que han llegado al final de su vida útil. También aplicamos técnicas de predicción y prevención, como la termografía y el monitoreo remoto, que permiten anticipar fallas y responder de manera inmediata”, subrayó.
La funcionaria añadió que la CFE desarrolla una red eléctrica inteligente para evitar pérdidas y saturaciones, mediante la aplicación de tecnologías como controles a distancia, cables de alta temperatura, transformadores digitales, monitoreo de líneas subterráneas, reparación remota de fallas y sensores móviles que detectan vibraciones y variaciones de temperatura en líneas de alta tensión.
Calleja destacó que la paraestatal ya emplea herramientas avanzadas para robustecer la infraestructura eléctrica y acelerar la implementación de proyectos que aseguren un desempeño óptimo. Entre las innovaciones mencionó tres de gran relevancia:
- Gemelos digitales: permiten simular proyectos y evaluar su eficacia para resolver problemas concretos antes de su ejecución.
- Siretih: sistema de monitoreo de huracanes que, además de seguir el trayecto de los fenómenos, predice rutas y posibles afectaciones en áreas específicas, líneas de transmisión o subestaciones, lo que ayuda a anticipar anomalías y reducir tiempos de atención.
- Drones: empleados para revisar terrenos de difícil acceso o evaluar daños tras desastres naturales.
La modernización de la red de transmisión forma parte del Plan Estratégico de Fortalecimiento y Expansión 2025-2030, presentado a inicios de este año. Este programa incluye 51 proyectos, entre ellos varios orientados a integrar fuentes renovables como la energía eólica y fotovoltaica, con la meta de avanzar hacia un sistema eléctrico más eficiente, seguro y sustentable.